Proyectan la instalación de un biodigestor en Colonia Vignaud

Un estudio para la producción de energía a partir de la utilización de biomasa residual pecuaria y urbana realizan con epicentro en Colonia Vignaud integrando a Morteros, Brinkmann, Seeber y Colonia San Pedro.
En un encuentro encabezado por el Secretario de Planificación Energética
del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos del gobierno de Córdoba,
Sergio Mansur expuso e intercambiaron conocimientos en el aula magna del
Instituto Agropecuario Salesiano con la intendenta anfitriona y gestora del
proyecto de Colonia Vignaud, Evangelina Vigna, el intendente de Brinkmann,
Mauricio Actis, el intendente de Morteros Sebastián
Demarchi, la presidenta comunal de Colonia San Pedro, María
Novachig, representantes de instituciones intermedias y empresas los alcances
del proyecto de análisis financiado por el Consejo Federal de Inversiones (CFI)
sobre la potencialidad que tiene la región para producir energía a partir de la
utilización de biomasa residual conformada por residuos urbanos orgánicos y del
sector agropecuario.
El referido estudio determinará si es factible
instalar un biodigestor para procesar esos residuos para generar energía
eléctrica o energía térmica y como tercer objetivo el programa se propone
avanzar sobre un plan de sostenibilidad para la región a los fines de ver cual
son todas las acciones que pudieren ejecutarse de manera asociativa para que el
territorio permita una proyección a las futuras generaciones.
“Nosotros contamos con una herramienta de
inteligencia territorial, a raíz de la información brindada por esa herramienta
terminamos en Colonia Vignaud”, comentó Sergio Mansur, quien señaló que “la
misma es la superposición de todas las bases de datos geoespaciales con que
cuenta la provincia, desde napas subterráneas hasta velocidad de los vientos a
200 metros de altura, es decir entre esas dos capas la subterránea y la de
altura están las capas de radiación solar, disponibilidad de biomasa, tipo de
suelo, los comercios, las empresas productoras, las categorías de cada una,
sistemas educativos, en fin datos blandos y duros que permiten encontrar
regiones geográficas donde es posible mejorar la producción a través del
aprovechamiento de algún recurso que no es suficientemente aprovechado o áreas
que pueden llegar a desarrollarse de una manera más importante frente a la
presencia de obras estratégicas que puede ejecutar la provincia en alianza con
el sector privado y los municipios”.
Según indicó Mansur, “esa herramienta tiene múltiples reportes, entre
esos reporte salió que la zona de Colonia Vignaud y alrededores tiene alto
potencial de generación de biomasa que no está siendo explotada
energéticamente, más el trabajo que venimos haciendo con la intendenta de
Colonia Vignaud Evangelina Vigna, hace que visualicemos la necesidad de contar
con un reporte de sostenibilidad para el territorio”.
En cuanto a la ubicación específica, el
funcionario provincial explicó que las variables que surjan determinarán el
sitio más adecuado para montar el receptor de biomasa. “Generalmente están
asociados a lugares donde hay mucha producción, donde hay redes eléctricas o
recursos que forma parte de la inversión que hace falta”, dijo.
En cuanto a la inversión necesaria para la instalación de un biodigestor
también se determinará en función de la cantidad de alimento que se pueda
aportar para la producción de energía, por lo que puede variar desde los 500
mil a 5 millones de dólares. “Una vez determinada esa escala los inversores
pueden ser diversos, pero fundamentalmente es saber de qué forma se va a vender
esa energía, a qué valor, porque si las remuneraciones de ese valor de energía
son atractivas los inversores naturalmente aparecen, por lo tanto no es
necesariamente que el municipio o los productores tengan que hacer la
inversión, sino que la venta de la energía es un atractivo para muchos
inversores”
“Se puede crear una alianza publico privada
entre todos aquellos que se favorecen positivamente con la presencia de un
biodigestor, pueden ser los municipios, más los productores, más otras organizaciones
como una cooperativa eléctrica que tome la decisión de apoyar el proyecto
porque inyectar energía en ese punto le favorece mejorando el servicio o la
capacidad de disponer de energía para la venta”, agregó.
Al referirse a los beneficios para el productor
agropecuario Sergio Mansur consideró que el más directo es dar un buen
tratamiento a los efluentes pecuarios, además a la concreta posibilidad de
valorizarlos energéticamente y en un segundo lugar de valorizarlos en cuanto a
la reducción de emisiones”.
“Un biodigestor lo que hace es capturar el biogás producido por la
materia orgánica y ese biogás contiene un gas altamente contaminante que es el
gas metano, por lo tanto en los mercados nacionales e internacionales capturar
ese metano es sumamente importante y está comenzando a pagarse para que esa
operación ocurra, existe una recompensa monetaria, esos son los dos beneficios
primeros vinculados a la economía de la empresa y un tercer gran objetivo es
que mejora la competitividad ambiental al reducir drásticamente la huella de
carbono; la ganadería tiene muchos adversarios por las altas emisiones que se
provocan por lo tanto hay un valor no monetario pero que impacta directamente
sobre la unidad de negocio que es dar competitividad ambiental”, especificó.
Finalmente destacó la participación de todos los
actores en la reunión. “Garantiza que este proyecto comience a desarrollarse y
en el transcurso del desarrollo del proyecto empezarán a aparecer distintas
soluciones que esperemos impacten sobre el territorio”.
Antes de la
reunión visitaron el tambo del establecimiento 4 Ceibos propiedad de la empresa
Fortezza S.A., en la que Andrés y Javier Bosio brindaron detalles del proceso
productivo y tratamiento de efluentes.